como evitar la carne a la parrilla
Estás de vacaciones, es hora de encender el carbón en la barbacoa de la playa y preparar las recetas que has estado esperando. Después de unos minutos en la barbacoa, los trozos de carne empiezan a soltar su jugo y es hora de darles la vuelta, pero se puede decir que están pegados a la barbacoa.
Lo creas o no, la carne pegada a la barbacoa es una situación muy común, pero no es agradable para los cocineros o los comensales. La consistencia cambia, el producto se descompone y deja un mal sabor en la boca, en sentido figurado. Pero no todo son malas noticias. Aquí hay algunos consejos sobre cómo hacer la perfecta barbacoa de playa y cocinar sin pegarse a la carne asada.
LA BARBACOA DEBE ESTAR A LA TEMPERATURA ADECUADA
El principal problema de la parrilla donde se atasca la carne es la temperatura. El calor expande el metal y el frío lo encoge. A medida que la temperatura cambia, el metal de la barbacoa se mueve incontrolablemente, causando que la carne se pegue.
El aceite tiene un efecto lubricante que evita que la carne se pegue. Un efecto similar se puede lograr limpiando la parrilla con cebollas o patatas cuando el metal está a la temperatura adecuada.
USAR LA SAL DE LA PARRILLA EN LA CARNE
La sal de la parrilla es un ingrediente utilizado para sellar la carne, lo que le da un sabor delicioso. A diferencia de la sal de grano, la sal para asar actúa como una especie de corteza que es absorbida por la carne y evita que se pegue a la parrilla.
Si quieres asar en la playa, asegúrate de tener suficiente sal de barbacoa entre los ingredientes y prepara la carne con mucha antelación.
EVITAR LA BARBACOA CON ACERO INOXIDABLE
El acero es el elemento básico de la barbacoa, es el mejor material para transferir el calor sin deformación y contaminación. Hoy en día, se encuentran muy a menudo barbacoas de acero inoxidable, que son más fáciles de limpiar y se ven mejor. Sin embargo, es mejor evitar este material porque se calienta más rápido y la carne tiende a pegarse. La ventaja más notable es que el acero inoxidable es más higiénico, pero con una barbacoa normal y un proceso de limpieza adecuado puedes tener una barbacoa de playa perfecta.
CONSEJOS PARA LA LIMPIEZA DE LA BARBACOA
Limpia tu parrilla con sal marina y aceite de oliva. Cubrir las barbacoas con sal marina y calentarlas hasta que se decoloren, luego dejarlas enfriar y quitar el exceso de sal. Finalmente, límpiese con un paño húmedo y un poco de aceite de oliva.
También puedes limpiar tu barbacoa como los chinos: Vierta una larga capa de aceite sobre el metal caliente de la barbacoa y déjelo comer antes de poner el siguiente. Repita este procedimiento varias veces. Recomendamos hacer esto el día en que la barbacoa no esté en uso o unas horas antes de la barbacoa de la playa.